The Time is Now

2005/10/26

Y así comienza

Me gusta registrar todo. Anotarlo, categorizarlo, priorizarlo, programarlo, configurar alertas, interrelacionarlo y que quede perfectamente reflejado; pero luego se me viene el mundo encima cuando veo la tremenda lista de tareas y los avisos se gatillan como tempestad. Me abrumo y al final los desoigo y hago lo que me siento con ganas de hacer. Y ahí queda la programación, todo muy bonito, pero al final no me sirvió de nada, en vez de una herramienta se transformó en un yugo; en vez de motivarme a cumplir mis metas, me agobia y desincentiva, pierdo el foco.

Cuando hay una emergencia, reacciono; y bajo presión diría que actúo con bastante más sentido práctico, pero de todas formas a veces me pongo perfeccionista. Cuando me hacen seguimiento, también me motiva. Creo que me motiva la interacción con las personas. Quizá no sólo hacer las cosas bien, sino que presentarlas y que alguien las reciba, las observe, las aprecie, me dé sus comentarios. A veces me cuesta recibir críticas, pero es porque yo soy bastante autocrítico y entonces me recrimino de no haberme hecho yo mismo antes la crítica que me hacen una vez que entrego un trabajo.

Necesito controles frecuentes. Mientras más tiempo transcurra entre controles, más pierdo el foco, más perfeccionista me pongo, y menos práctico.

Echo de menos el estar en contacto con otras personas, pero al mismo tiempo no soy muy bueno para trabajar en equipo. Me cuesta delegar. Soy muy exigente conmigo mismo y me cuesta serlo con los demás, porque creo que los abrumaría con el nivel de exigencia que yo pretendo; entonces típicamente me resigno a aceptar lo que me puedan entregar y asumo que tendré que acomodarlo o completarlo para que quede como yo creo que debe quedar. La excepción es cuando siento que otros tienen mejor manejo que yo en algún tema, en esos casos me limito a acatar.

Echo de menos el compartir con los compañeros de U, que los dejé de ver hace mucho, y eran excelentes personas. Además que me porté muy mal con ellos y no les di ninguna explicación. Creo que disfruté muy poco el tiempo en la U. O sea hubo varias ocasiones que disfruté mucho, y son esas ocasiones las que me gustaría volver a tener; no las veces que anduve achacado y bajón, que lamentablemente fue la mayor parte del tiempo.

Quiero tener un grupo de amigos. Hay gente con la que me avengo, pero no sé... siento que en cierta medida me tengo que ajustar a su estilo para que las cosas anden bien, y eso no me acomoda. Me gustaría poder ser yo mismo, no estar ajustándome; y que ellos me cayeran bien sintiéndolos yo a ellos auténticos también.

Bueno, por lo menos ahora ando en campaña para hacer amistades, porque hasta hace poco estaba en campaña de aislarme.

Creo que debiera retomar estudios. Me atemoriza el que me pueda ir mal, pero siento que debo hacerlo, debo potenciar mis talentos, para ganar peso en el mercado, a la vez que ganar seguridad en mí mismo.

Creo que a estas alturas, después de tantos años, lo más indicado sería tomar un preuniversitario, pero antes tengo que encontrar trabajo, o al menos ver si resultan algunos negocios por ahí y así tener algún ingreso.

Ahora, para que todo eso funcione, debo trabajar en mi obsesión perfeccionista; de lo contrario temo que se va a ir todo por la borda, y a estas alturas no están las cosas como para darme el lujo de que todo se vaya a pique, definitivamente no. Esta vez tiene que ser en serio, tiene que resultar sí o sí.